viernes, 21 de mayo de 2010

Fray Luis de León

Fray Luis de León1 (Belmonte, Cuenca, 1527 o 15282 – Madrigal de las Altas Torres, Ávila, 23 de agosto3 de 1591) fue un poeta, humanista y religioso agustino español de la Escuela salmantina.

Fray Luis de León es uno de los escritores más importantes de la segunda fase del Renacimiento español junto con Francisco de Aldana, Alonso de Ercilla, Fernando de Herrera y San Juan de la Cruz y forma parte de la literatura ascética de la segunda mitad del siglo XVI. Su poesía está inspirada por el deseo del alma de alejarse de todo lo terrenal para poder alcanzar a Dios, identificado con la paz y el conocimiento. Los temas morales y ascéticos dominan toda su obra.


BIOGRAFÍA

Fray Luis nació en Belmonte en 1527. Su padre era un abogado y consejero regio que residió en Madrid y Valladolid, ciudades donde hizo estudios de niño. Cuando cumplió los catorce años, marchó a estudiar a Salamanca, ciudad que constituyó el centro de su vida intelectual como profesor de su universidad. Allí ingresó en la Orden de los Agustinos (Orden de San Agustín), probablemente en enero de 1543, y profesó el 29 de enero de 1544.

Estuvo un periodo en la cárcel (en Valladolid, en la calle que ahora recibe el nombre Fray Luis de León) por traducir la Biblia a la lengua vulgar sin licencia; concretamente, por su célebre versión del Cantar de los cantares; su defensa del texto hebreo irritaba a los escolásticos más intransigentes.

Tras su estancia en la cárcel (del 27 de marzo de 1572 al 7 de diciembre de 1574), fue nombrado profesor de Filosofía Moral y un año más tarde obtuvo la cátedra de la Sagrada Escritura, que obtuvo en propiedad en 1579. En la universidad fue profesor de San Juan de la Cruz, que se llamaba por entonces Fray Juan de Santo Matía.

Las envidias y rencillas entre órdenes y las denuncias del catedrático de griego, León de Castro, entre otros profesores, le llevaron a las cárceles de la Inquisición bajo la acusación de preferir el texto hebreo del Antiguo Testamento a la versión latina (la traducción Vulgata de San Jerónimo) adoptada por el Concilio de Trento, lo cual era cierto, y de haber traducido partes de la Biblia, en concreto el Cantar de los Cantares, a la lengua vulgar, cosa expresamente prohibida.
Parece cierto que se puede atribuir la décima que presuntamente, al salir de la cárcel, escribió en sus paredes:

Aquí la envidia y mentira
me tuvieron encerrado.
¡Dichoso el humilde estado
del sabio que se retira
de aqueste mundo malvado,
y, con pobre mesa y casa,
en el campo deleitoso,
con sólo Dios se compasa
y a solas su vida pasa,
ni envidiado, ni envidioso!

La obra

Sus temas preferidos y personales, si dejamos a un lado los morales y patrióticos que también cultivó ocasionalmente, son, en el largo número de odas que llegó a escribir, el deseo de la soledad y del retiro en la naturaleza (tópico del Beatus Ille), y la búsqueda de paz espiritual y de conocimiento (lo que él llamó la verdad pura sin velo), pues era hombre inquieto, apasionado y vehemente, aquejado por todo tipo de pasiones, y deseaba la soledad, la tranquilidad, la paz y el sosiego antes que toda cosa:

Vivir quiero conmigo,
gozar quiero del bien que debo al cielo,
a solas, sin testigo,
libre de amor, de celo,
de odio, de esperanzas, de recelo.

Como poeta desarrolló la lira como estrofa, pero prefería el endecasílabo para las traducciones de poetas latinos y griegos, que por lo general realizaba en tercetos encadenados o en octava real.

Empezó a escribir en 1572 De los nombres de Cristo, obra en tres libros que no terminaría hasta 1585. En ella muestra la elaboración última y definitiva de los temas e ideas que esbozó en sus poesías en forma de diálogo ciceroniano donde se comentan las diversas interpretaciones de los nombres que se dan a Cristo en la Biblia

También se deben a fray Luis obras de cierta entidad en latín (De legibus, en tres libros; In Cantica Canticorum Salomonis explanatio, 1582; In psalmum vigesimumsextum explanatio, 1582) y algunas otras obras morales en castellano sobre educación, como La perfecta casada (Salamanca, 1584), dirigida a su prima, María Varela Osorio, donde describe lo que para él es una esposa ejemplar y establece los deberes y atributos de la mujer casada en las relaciones de familia, las tareas cotidianas y el amor a Dios


Aquí un link con las odas realizadas por Fray Luis de León :


lunes, 17 de mayo de 2010

Lirica Italianizante

En la lirica Italianizante Las formas estróficas empleadas: soneto, terceto, octava real, lira, canción y la silva.Los tipos de composoción más habituales serían los de procedencia clásica: oda, égloga, elegía, y epístola. *Los temas que se desarrollan en esa época son tres:
  • El amor: unas veces como fuente de satisfacción y tristeza y otras como purificador del espíritu del hombre.
  • La naturaleza: como marco de las relaciones amorosas y como reflejo del mundo en armonía y equilibrio que simboliza la perfección natural.
  • Los mitos: tomados como motivos temáticos en sí mismos o como recurso para expresar los sentimientos o reflexiones del poeta.

    El poeta que mayor plenitud y calidad a estas nuevas formas y temas fue Garcilaso de la Vega.Amor, la naturaleza y la mitologia, son temas fundamentales.Francesco Petrarca. De la literatura se recuperan asuntos mitologicos y algunos topicos o motivos:el carpe diem(aprovecha el momento) y el beatus ille(feliz aquel) y el locus amoenus (lugar idilico).GENEROS- nuevos generos; la egloga (los sentimientos se expresan a traves d la voz) la oda (reflexion moral y filosofica), la wpistola ( permite la expresion de temas domesticos y familiares), la cancion (empleada para el lamento amoroso).FORMAS METRICAS- soneto (endecasilabos) (ABBA ABBA) y dos tercetos (CDC DCD, CDE CDE), la octava real ( 8 versos endecasilabos) (ABABABCC) y la lira (5 versos endecasilabos y heptasilabos) (7a 11B 7a 7b 11B).

    GARCILASO DE LA VEGA-de origen noble, estuvo enamorado de Isabel Freyre. El poeta muere en conbate. Garcilaso consigue que los temas , el amor, la naturaleza, la mitologia, adquieran resonancias intimas y personales.El estilo de Garcilaso se basa en la seleccion del lexico y las imagenes, segun el principio de armonia y sencillez.El tono melancolico y suave.

    FRAY LUIS DE LEON-de familia con ascendencia judia.Fue fraile agustino y catedratico. Estuvo encarcelado por haber traducido al castellano el Cantar de los cantares.Ademas de escribir obras en prosa, la mayor parte d sus poemas son odas, en las que el autor reflexiona sobre la vanidad del mundo material, los valores de una vida sencilla y la armonia del universo creado por Dios. Tambien escribe algunas odas, a sus a migos, Francisco Salinas. Fray Luis empleo en sus poemas la lira.Su estilo sigue los principios de seleccion y naturalidad.

  • viernes, 7 de mayo de 2010

    Garcilaso de la Vega


    Garcilaso de la Vega (Toledo, entre 1498 —quizá algunos años antes a partir de 1494— y 1503– Le Muy, Condado de Niza, Ducado de Saboya, 14 de octubre de 1536) fue un poeta y militar español del Siglo de Oro, considerado uno de los escritores en español más grandes de la historia.

    Biografía


    Nació este eminente poeta, gran señor por su familia como por su ingenio, en la imperial ciudad de Toledo, en 1503, correspondiéndole por la elevada alcurnia de su casa el hábito de la orden de Alcántara.
    Desde muy joven siguió las banderas del Emperador Carlos Quinto, mostrando tales bríos y arrestos, que pronto se distinguió entre todos sus compañeros. Estuvo en casi todos los grandes hechos de armas de aquel glorioso reinado, habiéndose particularmente lucido en la defensa de Viena y en el sitio de Túnez, donde fue herido.
    Entonces se volvió a Nápoles, donde a pesar de sus eminentes servicios incurrió en la desgracia del Emperador, por haber protegido los amores de un sobrino suyo, que aspiraba a la mano de una dama que le era muy superior en jerarquía, por lo cual fue desterrado a una de las islas del Danubio, que con tanto donaire había de cantar.
    Mas no tardó en volver a la gracia del Emperador, dado que poco después le acompañaba en su expedición al Piamonte, en cuyo ejército tenía bajo su mando once banderas de infantería.
    Una vez derrotados los franceses y cuando ya se veían en retirada forzosa, el Emperador perseguía y daba caza; en esta operación ordenó la toma de una torre que se hallaba en un lugar cerca de Frejus, donde desesperadamente se defendían unos cincuenta franceses; Garcilaso fue de los primeros en subir, mas fue herido de una pedrada en la cabeza, y cayó. Lleváronle de allí a Niza, pero no sobrevivió sino veinte días a sus heridas, pues murió en dicho lugar a los treinta y tres años de edad. Era en 1536.
    El Emperador, indignado por la pérdida de uno de sus primeros oficiales, que tan joven era y tanto prometía, hizo pasar a cuchillo a todos aquellos franceses que le habían muerto.
    Pero si lo corto de su vida le impidió dar de sí todo lo que para la gloria de las armas habría podido, no fue ella tan corta para las letras, pues que ya en vida suya había recibido el título, que la posteridad le ha confirmado, de príncipe de los poetas castellanos.
    Sus obras eran conocidas de todo el mundo, y su autoridad tal, que el mismo Cervantes, que no tenía sobrada propensión al elogio, le consideraba como una de las más indiscutibles glorias de las letras patrias. Así, cuando el Licenciado Vidriera se partió para Italia, «los muchos libros que tenía los redujo a unas Horas de Nuestra Señora y un Garcilaso sin comento, que en las dos faldriqueras llevaba». Es decir, que al ingenioso licenciado le era imposible separarse de su gran poeta favorito.
    Otros autores han sido más o menos discutidos, y hasta se !es ha negado que fuesen verdaderos poetas, y sólo versificadores hábiles; pero la fama y renombre de Garcilaso han sido siempre y son de los más puros e indiscutidos.
    Es el primero de los poetas líricos castellanos, sin duda alguna, y representa por sí mismo uno de los géneros más en boga en nuestra literatura: el género bucólico, en el cultivo del cual llegó a tal altura que por nadie ha sido alcanzado.

    Trayectoria poética


    La poesía de Garcilaso está dividida por su estancia en Nápoles (primero en 1522–1523 y luego en 1533). Antes de ir a Nápoles su poesía no está marcada por rasgos petrarquistas, es en Nápoles donde descubre a los autores italianos. Después de su estancia abundará en rasgos de la lírica italiana, influido tanto por autores anteriores como Francesco Petrarca, como por autores contemporáneos como Jacopo Sannazaro, autor en 1504 de La Arcadia. Garcilaso hará suyo el mundo de la Arcadia, en el que sonidos, colores... invitan a la reflexión acompañando a los sentimientos. También influye a Garcilaso Ludovico Ariosto, de quien toma el tema de la locura de amor.

    Es en Italia donde Garcilaso fortalece su clasicismo, ya aprendido con los humanistas castellanos en la Corte, y redescubre a Virgilio y sus Bucólicas, a Ovidio y sus Metamorfosis y a Horacio y sus Odas, sin olvidar otros autores griegos que también estudia.

    La obra poética de Garcilaso de la Vega, compuesta por treinta y ocho sonetos, cinco canciones, una oda en liras, dos elegías, una epístola, tres églogas, siete coplas castellanas y tres odas latinas, se publicó por vez primera en 1543, a modo de apéndice de las Obras de Juan Boscán. La producción lírica de Garcilaso de la Vega, máxima expresión del Renacimiento castellano, se convirtió, desde muy pronto, en una referencia inexcusable para los poetas españoles, que desde entonces no pudieron ignorar la revolución métrica y estética operada por él en la lírica española al introducir con Juan Boscán y don Diego Hurtado de Mendoza una serie de estrofas (terceto, soneto, lira, octava real, endecasílabos sueltos, canción en estancias), el verso endecasílabo y su ritmo tritónico, mucho más flexible que el rígido y monótono del dodecasílabo, y el repertorio de temas, estructuras y recursos estilísticos del petrarquismo.

    El lenguaje de Garcilaso es claro y nítido, conforme a los ideales de su amigo Juan de Valdés: selección, precisión y naturalidad y palabra oral más que «escrita»; prefiere las palabras usuales y castizas a los cultismos extraños a la lengua, buscar el equilibrio clásico, la estilización del nobilitare renacentista de una lengua vulgar y la precisión ante todo. Como afirma en su Égloga tercera,

    Más a las veces son mejor oídos
    el puro ingenio y lengua casi muda,
    testigos limpios de ánimo inocente,
    que la curiosidad del elocuente.


    Esto es, es preferible evitar la retórica pomposa y la expresión forzada y culta para que la poesía pueda aparecer como sincera, genuina y espontánea; el objetivo de la poesía es ser oído, es la comunicación de los sentimientos, no el cortesano despertar de admiración. Garcilaso, pues, prefiere el tono íntimo, personal y confidencial en la poesía a la retórica y pompa de tonos más marciales o a la culta exhibición cortesana del ingenio, con lo que pone la primera piedra de una corriente lírica hispánica que todavía latirá en la poesía de Gustavo Adolfo Bécquer.

    El estilo de Garcilaso es muy característico: cuida especialmente la musicalidad del verso mediante el uso de la aliteración y un ritmo en torno a los tres ejes acentuales del endecasílabo. Utiliza asiduamente el epíteto con la intención de crear un mundo idealizado donde los objetos resultan arquetípicos y estilizados al modo del platonismo. Por otra parte, es muy hábil en la descripción de lo fugitivo y huidizo; su poesía produce un vívida sensación de tiempo y se impregna de melancolía por el transcurso de la vida, lo que él llamó su «dolorido sentir»:

    No me podrán quitar el dolorido
    sentir, si ya primero
    no me quitan el sentido.


    El paisaje resulta arcádico, pero instalado rigurosamente en sus predios manchegos de Toledo, al margen del río Tajo. Aparecen los temas mitológicos como alternativa a los temas religiosos: Garcilaso no escribió ni un verso de tema religioso. La mitología suscitaba en él una gran emoción artística y se identificaba plenamente con algunos mitos como el de Apolo y Dafne. Como señala Margot Arce Blanco, una de sus principales estudiosas, sus temas preferidos son los sentimientos de ausencia, el conflicto entre razón y pasión, el paso del tiempo y el canto de una naturaleza idílica que sirve de contraste a los doloridos sentimientos del poeta. Cree en un trasmundo que no es el religioso cristiano, sino el pagano:

    Contigo, mano a mano
    busquemos otros prados y otros ríos,
    otros valles floridos y sombríos,
    donde descanse, y siempre pueda verte
    ante los ojos míos,
    sin miedo y sobresalto de perderte.

    Una de sus obras



    jueves, 6 de mayo de 2010

    Lírica renacentista

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    La poesía de este período se dividió en dos escuelas: la Salmantina (Fray Luis de León) y la Sevillana (Fernando de Herrera)

    La Escuela Salmantina, tiene como rasgos distintivos:

    Concisión en el lenguaje;

    Llaneza en la expresión;

    Realismo en el pensamiento;

    Preferencia por la estrofa corta;

    La naturalidad y la sencillez.


    La Escuela Sevillana, en cambio, es:


    Grandilocuente;

    Pule en extremo la forma;

    Su obra es más de meditación que de sentimiento, más de documentación que de observación de la naturaleza y de la vida;

    Prefiere la estrofa larga y la composición extensa
    Usa abundantemente los adjetivos y el ornato retórico.



    Orígenes

    La lírica renacentista se origina a partir de:

    La tradición, que perpetúa temas y formas de la lírica medieval. Esta tradición se compone tanto de la lírica tradicional, oral y popular (villancicos, canciones de amor...) y la lírica no-escrita que transmitía el romancero, como la lírica culta (de autores como Juan de Mena o el Marqués de Santillana) y la lírica cortesana de raíz trovadoresca recogida en los cancioneros el más famoso de los cuales fue el de Hernando de Acuña.



    La corriente innovadora de raíz petrarquista y, por tanto, italianizante, que madurará gracias a Boscán y a Garcilaso. Esta corriente bebe en realidad de las mismas fuentes que la anterior: la lírica provenzal. Manejan por tanto una misma concepción del amor como servicio que dignifica al enamorado.


    Características

    En cuanto a la métrica utilizada, se adoptan versos (endecasílabo y heptasílabo) y estrofas (lira, silva, octava real, tercetos encadenados, soneto) procedentes de Italia.

    Asimismo, aparecen géneros característicos como la égloga (los protagonistas son pastores idealizados), la oda (para asuntos graves) o la epístola(poema en forma de carta).

    La lengua en esta época está dominada por la naturalidad y la sencillez, huyendo de la afectación, del amaneramiento y de la frase rebuscada. Así el léxico y la sintaxis serán sencillos.

    Los temas preferidos por la poesía renacentista son, fundamentalmente, el amor, concebido desde el punto de vista platónico; la naturaleza, como algo idílico (bucolismo); la mitología, utilizada como tema central o como ornamento para un asunto amoroso y la belleza femenina, siguiendo siempre un mismo ideal clásico.

    En relación con estos temas mencionados, existen varios tópicos renacentistas, tomados del mundo clásico algunos de ellos:


    -El
    Carpe Diem, cuya traducción sería "atrapa el día" o "aprovecha el momento". Con él se aconseja el disfrute de la vida antes de la llegada de la vejez.

    -El
    "Descriptio puellae”, descripción de la belleza ideal de la mujer.

    -El
    Beatus Ille o alabanza de la vida del campo, apartado de lo material, frente a la vida de la ciudad, con sus peligros e intrigas.

    -El
    Locus amoenus o descripción de una naturaleza perfecta e idílica.

    -El
    "Aurea mediocritas", gusto y satisfacción por lo sencillo, lo que se posee... frente al deseo desmesurado de riquezas

    San Juan de la Cruz




    BIOGRAFÍA

    Su verdadero nombre era Juan de Yepes y nació el 24 de junio de 1542 en Fontiveros, pequeño pueblo abulense perteneciente a Castilla y León.
    A los 17 años, ingresa en un colegio de jesuitas para estudiar humanidades.

    El año 1563 toma los hábitos de la orden religiosa Carmelita, adoptando el nuevo nombre de fray Juan de san Matías; al año siguiente se traslada a Salamanca para cursar estudios de teología en su célebre universidad. En el año 1567 es ordenado sacerdote, y adopta el nuevo y definitivo nombre de Juan de la Cruz.

    En 1568 Juan de la Cruz fundó el primer convento de Carmelitas Descalzos, los cuales practicaban a ultranza la contemplación y la austeridad. Unos años después, 1577, sus intentos reformistas de las órdenes monásticas, le llevaron a sufrir 9 meses de dura prisión.
    De su cautiverio en aquella cárcel-convento de Toledo, nace la composición de su obra cumbre: "Cántico espiritual". En otras poesías se puede llegar a entrever en lenguaje subliminal, el relato que hace de su astuta y sorprendente huida en la madrugada del 15 de agosto de 1578.

    Con su huida dio en refugiarse en un convento de Jaén y continuó con la reforma carmelitana, fundando varios conventos por Andalucía. En esta región llegó a ser nombrado Vicario Provincial de la orden de Carmelitas Descalzos; pero el buen Juan siguió con su obstinación de la reforma, lo que le llevó a enfrentamientos con la jerarquía religiosa y a sufrir nueva prisión.

    Cuando por fin es excarcelado y se dispone a cumplir con el traslado que se le impone a América, el 14 de diciembre de 1591, muere a la edad de 49 años.

    135 años después, es elevado a la categoría de santo, por la iglesia católica.
    La obra poética de san Juan de la Cruz está inspirada en un profundo sentimiento religioso. A decir de algunos de sus biógrafos, su poesía en general tiene un estilo similar al bíblico.

    SUS OBRAS MÁS FAMOSAS SON:

    1. SUBIDA AL MONTE CARMELO
    2. CÁNTICO ESPIRITUAL
    3. LLAMA DE AMOR VIVA
    4. POESÍAS COMPLETAS
    5. NOCHE OSCURA

    ALGUNAS DE SUS CITAS MÁS FAMOSAS FUERON:
    -"Pon amor donde no hay amor, y sacarás amor."

    -"En el ocaso de nuestra vida seremos juzgados en el amor"

    -"Para venir a gustarlo todo, no quieras tener gusto en nada"

    -"Cuando reparas en algo,
    dejas de arrojarte al todo;
    para venir del todo al todo"

    -"El llanto del hombre en Dios, y en el hombre la alegría, lo cual del uno y del otro tan ajeno ser solía "

    -"Y que Dios sería hombre, y que el hombre Dios sería, y trataría con ellos, comería y bebería "

    -"El alma que anda en amor, ni cansa ni se cansa"

    -"¡Oh noche que guiaste!
    ¡Oh noche amable más que el alborada!
    ¡Oh noche que juntaste
    Amado con amada,
    amada en el Amado transformada!"


    AQUÍ PODEMOS ENCONTRAR UN VÍDEO SOBRE UNO DE SUS POEMAS (NOCHE OSCURA)